viernes, 22 de enero de 2010

Allá lejos y hace tiempo...

Más de un año ya, dejaba de escribir, por que alguién llegaba a mi vida. Mucho tiempo sin un post. Hoy nuestra vida se resume en una casa que compartimos, hijos, (los mios, los de él), miles de proyectos que de a poco y por orden de prioridades van viendo la luz; un gato, el laburo, y la felicidad esporádica, efímera, resumida en momentos; pero que todos disfrutamos.
Así, listados sin ningún orden, contemplo tranquila la lista de mis haberes emocionales.
Hoy voy despejando el camino de rastis, bakuganes, y demás chucherías, así cuando se levante al baño no se clave alguno en los pies...
Me levanto a las 6.20 a planchar y ordenar su uniforme de laburo.
Me da un beso cuando se va.
Cocino para cinco.
Charlo con un adolescente, tratando de ponerme en su lugar.
Hoy si bien la peleamos casi todos los días, la pelea es de a dos.
Lo amo, me ama.
No es un principe el que me rescató, es un hombre; uno al que la vida preparó para mi.
Vuelvo al ruedo.